9 de junio de 2009

Test de agudeza visual.

Uno de los dos personajes de las fotografías superiores ha tenido que huír de su país por defender los derechos de los indígenas americanos.

El otro será galardonado próximamente por defender la oligarquía sudamericana.

1 de junio de 2009

Cangrejos de río: mitos y verdades


Hoy, día 1 de Junio se levanta la veda de pesca del cangrejo rojo americano (Procambarus clarkii, Girard 1852) en los ríos y humedales de Castilla-La Mancha. Este cangrejo procedente de Luisiana, dónde se cultiva de manera extensiva, es un modelo de especie oportunista (y por ello tiene la fama de ser el Decápodo con mayor capacidad de adaptación): capaz de vivir cómodamente en aguas de curso lento y templadas (su ideal está entre 21 y 29ºC), en arrozales (con el déficit de oxígeno disuelto que conlleva este cultivo), en estanques y sistemas de riego y hasta en zonas de aguas algo salinas. Su alimentación es omnívora y devora tanto vegetales como carne (siendo el hígado crudo uno de los mejores cebos para su pesca). Viven de 5 a 10 años y alcanzan la madurez sexual a los 3, llegando a producir entre 200 y 900 huevos por cada ciclo. Observando los datos no es difícil imaginarse a que velocidades puede llegar a expandirse esta especie y quizás por eso existe la creencia popular de que la razón por la que el cangrejo de río ibérico (Austropotamobius pallipes, Lereboullet 1858) ha quedado desplazado de la mayoría de ríos de la península es debido a una competencia directa entre el cangrejo rojo y el autóctono.

La naturalización de P. clarkii no es si no el resultado de una política de introducción de especies europeas y américanas llevada a cabo desde los años 60 (Harbsbugo-Lorena, 1978; Lowery & Holdich, 1988) con fines comerciales. En 1962 se intentó la naturalización sin éxito del cangrejo noble (A. astacus) procedente de Centroeuropa. En 1975 se intentó introducir en Valladolid una partida de cangrejo de patas delgadas (A. leptodactylus), con la misma suerte que en casos anteriores.
En el año 1973 llegó por primera vez P. clarkii a la provincia de Badajoz, reproduciendose con un notable éxito, que llevó en 1974 a la suelta de otro lote distinto en la provincia de Sevilla junto con otro pariente americano: P. zonangulus, que no prosperó.
Además de la introducción del famoso cangrejo de río americano en 1974 se importó desde Suecia el cangrejo señal (Pacifastacus leniusculus) originario de la costa de California, que también prosperó en su aclimatación (Carral et al., 1993).



Hoy se sabe que la causa de la dispersión de P. clarkii por toda la geografía española se debe a los beneficios económicos de deja la pesca del crustáceo, que ha sido transportado por los propios pescadores soltando los ejemplares mas jóvenes en zonas no invadidas (incluso llevando a realizar un transporte activo desde la cuenca atlántica hasta la Albufera de Valencia y el Delta del Ebro). También es destacable el comportamiento tan activo del cangrejo, que aumenta su tasa de dispersión, aunque no pueden aventurarse mucho mas allá de unas decenas de kilómetros y siempre en periodos húmedos.

El impacto ecológico de P. clarkii esta caracterizado por su condición de “especie ingeniera del ecosistema”, es decir, que es capaz de modificar los factores ambientales de modo que limita o permite el acceso a otras especies. Su principal actividad ingeniera es la capacidad que tiene de destruir las praderas de macrófitos acuáticos y por su capacidad de enterramiento (Gutiérrez-Yurrita 1994, Montes 1993, y Bravo, 1998). Además hay que añadir el impacto que se crea por la pesca del decápodo por los propios pescadores, ya que las áreas dónde el cangrejo es mas abundante suelen coincidir con zonas de importancia para las aves (Zonas Ramsar, IBAs o ZEPAS), y los problemas derivados del método de pesca que al ser no restrictivo puede capturar especies de vertebrados protegidos (peces y anfibios).

Afanomicosis
Desde la introducción de las especies de cangrejo alóctonas, A. pallipes ha venido sufriendo la afanomicosis, causada por el oomyceto Aphanomyces astaci que es transportado tanto por P. clarkii cómo por P. leniusculus (cangrejo señal). Este hongo, el verdadero causante del retroceso del cangrejo autóctono, crece sobre la cutícula no esclerotizada del cangrejo (tras el proceso de ecdisis o muda) y desarrolla su micelio hasta alcanzar la cavidad interna del cangrejo, ocasionándole la muerte.
Aunque en especies americanas la infección crónica puede volverse letal en condiciones de estrés, la baja letalidad de la afanomicosis en estas especies favorece la dispersión del hongo, que es incapaz de vivir fuera del cangrejo portador (Cerenius & Söderhäll, 1992).

En Europa se tiene constancia de 4 cepas diferentes de A. astaci (Huang et al., 1994; Diéguez-Uribeondo et al., 1995) y los trabajos de investigación parecen indicar que los casos de “peste” son originados por la cepa del grupo “B”, originaria del cangrejo señal, P. leniusculus (Diéguez-Uribeondo & Temiño, 1997).

El tercero en discordia: cangrejo señal



Este cangrejo puede alcanzar los 15cm de longitud y posee unas robustas pinzas con una mancha blanca que le ha reportado su actual nombre común. Son omnívoros, cómo todo buen cangrejo, aunque su capacidad de depredación es menor que la de P. clarkii.
Actualmente se realizan erróneamente repoblaciones con esta especie en lugares donde ha desaparecido el cangrejo autóctono, de tal forma que su rango de distribución ha aumentado considerablemente. Se han citado poblaciones de P. leniusculus en las siguientes Comunidades Autónomas: País Vasco, Castilla León, Castilla-La Mancha, Navarra, La Rioja. De igual forma, ha aumentado el número de granjas dedicadas a su cultivo con fines de repoblación, actualmente operan 3 granjas. Su pesca es autorizada y está bien reglamentada en algunas Comunidades Autónomas como Castilla-León, Navarra y País Vasco, mientras que en Castilla-La Mancha está prohibida su pesca (Decreto 91/1994) y comercialización (R.D. 1118/89). Se estimó que la producción de esta especie en 1988 llegó a una tonelada (A. Habsburgo-Lorena, com. pers.), durante 1994 se produjeron en granjas de España cerca de 0.6 Toneladas para consumo humano, y 1.5 millones de juveniles de estado 2 para repoblación (Pérez, et al. 1997).
Cómo apunte: quienes lo han probado dicen que es mucho mejor culinariamente que el cangrejo rojo de Luisiana.

La víctima: Austropotamobius pallipes



El cangrejo es de color oliva, con la parte inferior entre pálida y colorada. Suele medir 10 o 12 centímetros. Tiene grandes pinzas, antenas de tamaño medio y 8 apéndices locomotores. El cefalón y el tórax tienen gran tamaño, en comparación con el abdomen, que mide la mitad del cuerpo. Actualmente vive en ríos fríos (su rango óptimo de temperatura es de 16 a 18ºC, pero vive en aguas mucho mas frías), en los que el hongo A. astaci no sobrevive (cómo zoospora) y las aguas son demasiado frías para los cangrejos de río americanos.

La pesca
Parece que cómo siempre, en materia medioambiental en Castilla-La Mancha vamos por nuestro lado y la protección de la que goza P. leniusculus es, de acuerdo con los estudios realizados, contraproducente para la conservación de la especie autóctona.
La pesca de P. clarkii esta condicionada no transportar los individuos vivos (y cuidado por que aquí si que puede caer una buena multa), para evitar la invasión de otra áreas, y no existen tallas mínimas, con lo que deben ser destripados tras la pesca.
Austrapotamobius pallipes es una especie Vulnerable (UICN), cuya pesca y tenencia esta prohibida en todo el territorio español.

Yo ya estoy deseando hacerme una buena cazuela de cangrejos con salsa… americanos, por supuesto.



Mas información disponible en la página El Cangrejo de Río y Afanomicosis.