28 de marzo de 2012

Mas razones para salir a la calle el 29M (...y no precisamente para ir a trabajar)

Razones para no ir a la huelga

Los profesores del IES Arturo Soria han escrito en su blog una serie de razonamientos para desmontar los argumentos mas machacones de los esquiroles:

De cara a la huelga general del 29 de Marzo probablemente habrás escuchado algunos de los argumentos que algunas personas repiten como mantras para justificar su postura ante la huelga.
Cuando una mentira se repite mil veces sigue siendo una mentira, aunque a base de repetirla haya quien se la empiece a creer. Cuando alguien necesita una justificación que sabe que es falsa para para disculparse por actúar de cierta forma es muy probable que no tenga la conciencia tranquila.
Si estás en contra de esta reforma laboral pero indeciso ante la huelga general, o si has decidido no participar en ella tomando tu decisión en base a alguno de estos argumentos a lo mejor te interesa analizarlos desde otro punto de vista:

Argumento esquirol #1: "No hago huelga porque no me lo puedo permitir".

La reforma laboral supondrá con toda seguridad una rebaja generalizada de los salarios. Si no puedes permitirte dejar de ganar el sueldo de un día, menos podrás permitirte que te bajen el sueldo permanentemente, que te despidan gratis, o que si tienes 10 años trabajados en una empresa tu indemnización por despido pase a ser de 18900 euros a 7845, por poner un ejemplo. Acudir a tu puesto de trabajo el 29M es (poco) pan para hoy y hambre para mañana.

Argumento esquirol #2: "La huelga no servirá para nada".

Todas las mejoras de los trabajadores se han conquistado historicamente a través de la lucha. Nadie nos ha regalado nada. Lo que está demostrado que no sirve para nada es no hacer nada. A la pregunta de si una huelga de un día será suficiente, la respuesta es que probablemente no. Es sólo el principio, pero es un paso muy importante. Si nos imponen la reforma laboral más dura de esta "democracia" y no respondemos de forma contundente las medidas sucesivas que tome el gobierno serán aún más demoledoras. Se puede y se debe tumbar esta reforma laboral.

Argumento esquirol #3: "La huelga no soluciona nada".

La huelga no es una solución, es el instrumento de presión más poderoso que hoy por hoy los trabajadores tenemos a nuestro alcance para hacer valer nuestros derechos ante una agresión totalmente injustificada. Por eso quien no se adhiere a una huelga perjudica gravemente al conjunto de los trabajadores, incluido a sí mismo.
Si la presión que podemos ejercer a través de una huelga no fuera tan importante ¿de dónde proviene el empeño de los empresarios en que los trabajadores no la secunden llegando a las amenazas y coacciones, que son delito? ¿Por qué motivo los medios de comunicación afines al gobierno tratan de desprestigiar la convocatoria de huelga? ¿Por qué la patronal exige y algunos partidos se están planteando legislar para limitar este derecho?

Argumento esquirol #4: "No estoy de acuerdo con los sindicatos mayoritarios, por eso no hago huelga".

A la convocatoria de huelga se han sumado decenas de sindicatos minoritarios de diversos sectores y de distintas ideologías. Es más, los primeros convocantes de esta huelga no fueron UGT y CC.OO. sino ELA-LAB en el País Vasco y CIG en Galicia. También se han sumado a la convocatoria los sindicatos CNT y CGT, la Intersindical-STE, USO, Solidaridad Obrera etc. partidos políticos tan dispares como IU, Esquerra, Compromis, Amaiur, BNG, Equo, Izquierda Anticapitalista etc; asociaciones de consumidores como FACUA y más de 950 organizaciones sociales de todo tipo, además de 15M, Juventud Sin Futuro y Democracia Real Ya quienes no comparten la verticalidad de los sindicatos mayoritarios y son críticas con su labor de los últimos años pero aún así apoyan la convocatoria de huelga general del 29M.
Esta huelga es de todos los trabajadores y trabajadoras, de los estudiantes, desempleados, jóvenes, amas de casa,jubilados, de los consumidores. Es la huelga del 99% de la población, de todos los afectados por los recortes sociales y las pérdidas de poder adquisitivo y de derechos colectivos, no sólo de los sindicatos.
Los sindicatos CCOO y UGT han podido cometer muchos errores y criticarlos es lícito e incluso necesario. Pero los sindicatos entendidos como organizaciones de trabajadores que se unen para defender sus derechos e intereses son, indudablemente, el próximo muro a derribar por los poderes económicos. De ahí la campaña continuada de ataques y de desprestigio desde los medios de comunicación afines al gobierno de la que todos estamos siendo testigos.

Argumento esquirol #5: "Hay libertad, cada uno puede hacer lo que quiera. Yo quiero ir a trabajar porque si hago huelga me descuentan x euros."

No hay libertad porque te están coaccionando con una penalización económica. La libertad es otra cosa, no verte obligado a ceder a los chantajes de gobierno y empresarios a cambio del sueldo de un día.
Renunciar a derechos laborales históricos como la negociación colectiva por un puñado de euros es venderlos realmente barato.

Argumento esquirol #6: "Hay libertad, cada uno puede hacer lo que quiera. Yo quiero ir a trabajar porque en mi empresa si haces huelga te miran mal y si luego hay que despedir a alguien seguro me despedirán a mí en vez de a otro".

No hay libertad porque te están coaccionando con posibles represalias o con el despido. La libertad es otra cosa, no verte obligado a ceder a los chantajes de gobierno y empresarios renunciando a tu derecho constitucional a la huelga por miedo.
La libertad solo se ejerce en situación de igualdad. Es falso que los trabajadores tengamos libertad cuando hay una situación de desigualdad y una desproporción tan enorme entre el poder de las empresas y el nuestro. Por eso es tan importante que seamos capaces de responder de forma colectiva ante esta reforma laboral.
Argumento esquirol #7: "La huelga tiene que ser indefinida, si no yo no la hago".
Generalmente los partidarios de la huelga indefinida sabemos lo mucho que cuesta organizar y desarrollar una huelga general para que sea mayoritaria y exitosa y no empleamos un modelo de huelga concreto como excusa para no secundar una huelga general convocada con un gran consenso. Es improbable que una persona realmente dispuesta a secundar una huelga indefinida no estuviese dispuesta a secundar una huelga general de un día.

Argumento esquirol #8: "Los piquetes presionan a la gente, obligándola a que haga huelga. Los trabajadores son libres de ir a trabajar un día de huelga."

Si la libertad realmente tuviera tantos defensores nos iría bastante mejor de lo que nos va. En la mayoría de los casos quienes mantienen esa postura ocultan o defienden las coacciones y amenazas con que muchas empresas tratan de impedir los a trabajadores ejercer su derecho constitucional a la huelga y aceptan alegremente como algo normal que éstos se vean obligados a someterse al chantaje acudiendo a sus puestos de trabajo por miedo a perder sus empleos o el favor de sus jefes.
Los piquetes históricamente impedían que los empresarios contrataran personal para cubrir los puestos de los huelguistas y en la actualidad tratan de garantizar el derecho a huelga de aquellos que por presiones de las empresas no pueden ejercerlo. Los piquetes informativos apelan a la responsabilidad de los trabajadores, les informan de sus derechos, de los motivos de la huelga, y de las consecuencias negativas que tiene acudir ese día a sus puestos de trabajo. Los piquetes informativos están reconocidos legalmente: tienen y pueden ejercer su derecho a informar los días de huelga.
Recordemos además que el derecho al trabajo está reconocido en la Constitución también los días en los que no hay Huelga General aunque al gobierno no le interese lo más mínimo garantizar su cumplimiento y que también es un derecho fundamental de los trabajadores que ya están siendo despedidos como consecuencia de una reforma laboral injusta.
El derecho al trabajo digno es, precisamente, lo que defendemos los huelguistas.

Argumento esquirol #9: "Con las huelgas no se consigue nada" (Pero en caso de que se consiga algo, no renunciaré a ello).

Las jornadas de 8 horas diarias o 48 semanales, la prestación por desempleo, las horas extraordinarias, el salario mínimo, la negociación colectiva, las vacaciones pagadas, la indemnización por despido, el permiso por maternidad o cualquiera de nuestros derechos conquistados que los trabajadores de hace 150 años desconocían por completo no se consiguieron a base de ejercer la "libertad para ir a trabajar" un día de huelga. Pese a ello no se tiene noticia de que ningún esquirol haya renunciado a ellos. Si se consigue hacer al gobierno rectificar y no aplicar esta reforma laboral que a todos nos afecta y perjudica los esquiroles no habrán hecho nada por conseguirlo pero se beneficiarán del esfuerzo colectivo. Para ellos esto debe de tener mucha lógica; para todos los demás carece de ella y no les hace parecer personas dignas, coherentes ni solidarias a nuestros ojos.
Argumento esquirol #10: "Soy funcionario. La reforma laboral a mí no me afecta."
Con los recortes y la privatización de los servicios públicos y el deterioro de las condiciones laborales (y los que están por venir) de funcionarios, interinos y personal laboral de la administración pública tenemos motivos más que suficientes para secundar la huelga general, además de por solidaridad con el resto de trabajadores.

Si no secundamos mayoritariamente la huelga general no podremos quejarnos cuando el resto de la sociedad no nos apoye en nuestras revindicaciones por la supervivencia, la dignidad y los derechos laborales del sector público. Los despidos y las rebajas en los complementos del sueldo de los funcionarios así como la eliminación de pagas y sexenios están al caer. Además, mira a tu alrededor: padres, hermanos, hijos, familiares, amigos, vecinos, alumnos... ¿seguro que algo que afecta al 99% de la población no va contigo?

Argumento esquirol #11: "Soy autónomo, a mí la reforma laboral no me afecta."

Un menor salario y unas peores condiciones laborales para la mayoría de los clientes y usuarios de un pequeño comercio o empresa de servicios implica casi con toda seguridad un empeoramiento de las suyas, ya que nadie consume más ni contrata más servicios si bajan sus ingresos o si tiene miedo a perder su trabajo.

La mayoría de los trabajadores autónomos pueden repartirse el trabajo en otras jornadas sin que les afecte enormemente secundar un día de huelga.
Para los pequeños comerciantes abrir un día de huelga no supondrá una diferencia significativa ni una mejora sustancial en su pequeño negocio. Ni siquiera les procurará los ingresos de un día normal ya que el 29M también hay convocada una huelga de consumo. Sin embargo, muchos de sus clientes valorarían positivamente su solidaridad al secundar la huelga del 29M. En lugar de abrir un día que pocos van a comprar y muchos van a decidir no volver a hacerlo en establecimientos esquiroles puedes colocar en tu tienda un cartel que diga:
"Estimado cliente, en solidaridad con los trabajadores asalariados este comercio ha decido cerrar el día 29 de marzo por Huelga General. Creemos que la reforma laboral perjudica a la mayoría de nuestros clientes y a sus familias. Las grandes superficies abrirán, por ello le sugerimos que tenga en cuenta como consumidor a los establecimientos solidarios con los derechos de la mayoría. El día 30 estaremos de nuevo a su disposición. Disculpen las molestias."

Argumento esquirol #12: "Estoy en paro, no puedo hacer huelga." o "Hay 5.000.000 de parados deseando trabajar, la huelga es para los que se la pueden permitir".

Si estás en situación de desempleo la reforma laboral te afecta tanto o más que a los demás. Aunque algunos políticos se han atrevido a utilizarte como excusa para agredir los derechos del conjunto de los trabajadores lo cierto es que esta reforma laboral, como la propia patronal ha reconocido “no creará empleo a corto plazo” y "las cifras de paro se incrementarán durante 2012" por lo que es cuestionable que vaya a contribuir a mejorar en algo tu situación.
Sabemos que el objetivo de esta reforma laboral no es crear empleo sino sustituir empleo estable y con derechos por un empleo cada vez más precario pero que ofrezca unos datos de afiliación a la Seguridad Social que el gobierno pueda emplear para afirmar que hay menos paro. La calidad de vida de los trabajadores no aparece reflejada en esas estadísticas.
Por eso ahora se cuestiona tu derecho a percibir una prestación por desempleo y se te culpabiliza por tu situación de parado obligándote a realizar trabajos forzados (en beneficio de la comunidad, los llaman) y negándote la prestación por desempleo que te corresponde por derecho si rechazas tres ofertas de empresas de trabajo temporal (que ahora podrán actuar como oficinas del INEM) por muy precarias y mal remuneradas que sean, por poco que se ajusten a tu perfil profesional o por lejos que se encuentren de tu casa.
Además, si tienes finalmente la “suerte” de que una empresa te contrate tras un periodo de prueba de un año podrán volver a despedirte y no tendrás derecho a una indemnización. Gracias a la reforma laboral ha quedado instaurado el despido libre.
Durante la huelga se insiste mucho en que todas las personas tienen derecho a acudir, si así lo desean, a sus puestos de trabajo. Como sabes por experiencia, el resto de los días nadie se preocupa demasiado por garantizar a más de cinco millones de personas el derecho al trabajo que la propia Constitución les reconoce.
Un día de huelga general los trabajadores en activo tienen la posibilidad de secundarla no acudiendo a sus puestos de trabajo, pero una huelga activa admite mucha más participación que esa y todos los trabajadores en situación de desempleo pueden y deben sumarse a ella defendiendo junto al resto los derechos de todos.
Como trabajador en situación de desempleo puedes participar en la huelga de consumo no comprando, ni contratando ningún servicio, no circulando ni repostando, no utilizando el transporte ni otros servicios públicos que no sean de emergencia. Puedes participar reduciendo al máximo tu consumo de teléfono, agua, gas y electricidad.
Puedes afiliarte y participar en los piquetes informativos de los sindicatos u otras organizaciones sociales, en lascampañas de información y otras actividades que promueven las asambleas de barrio del 15M, puedes incluso visitar tu último puesto de trabajo, saludar a tus antiguos compañeros y tratar de concienciarles de lo importante que es esta huelga y de explicarles cómo esta reforma laboral les perjudica tanto como a ti.
Usa todo tu potencial, tu inteligencia y tu alegría para defender unos derechos que son tuyos y que son de todos. Si no luchas por ellos, nadie lo hará por ti.

Argumento esquirol #13: "Ya, pero este gobierno tiene mayoría absoluta, la gente les ha votado y por tanto pueden hacer lo que quieran. Que yo haga huelga no cambiará nada".

Los votos recibidos en unas elecciones no legitiman a un gobierno para lanzar un ataque tan brutal a los derechos de la mayoría de la ciudadanía. Además aspectos esenciales de esta reforma laboral como puede ser el abaratamiento del despido no aparecen en el programa electoral del PP y por tanto NADIE los ha votado. De hecho varios representantes de este partido negaron públicamente tanto durante la última legislatura como durante su campaña electoral que fueran a abaratar o a facilitar el despido.
El gobierno ha ocultado información deliberadamente antes de las elecciones y ha mentido a los ciudadanos sobre sus verdaderas intenciones.
Si la sociedad se pronuncia al unísono contra una reforma laboral injusta un gobierno democrático está obligado a escuchar y a obedecer.

Argumento esquirol #14: "El país no está para huelgas".

Para lo que no está el país es para una reforma laboral que no solucionará el problema del desempleo y provocará despidos y más precariedad en los nuevos contratos.
Para lo que no está el país es para que nuestras familias sigan perdiendo poder adquisitivo porque todo sube mientras nuestros salarios bajan.
Para lo que no está el país es para que más familias sean desahuciadas de sus casas para salvaguardar el negocio sucio de los bancos y de las inmobiliarias.
Para lo que no está el país es para que los trabajadores asalariados paguemos proporcionalmente más impuestos que empresarios y grandes fortunas.
Para lo que no está el país es para que la iglesia siga sin autofinanciarse, no pague impuestos como el IBI (que los trabajadores sí pagamos) ni para que siga recibiendo cientos de millones de euros de las arcas públicas.Para lo que no está el país es para más rescates a la banca con dinero público y ningún impuesto sobre sus actividades.
Para lo que no está el país es para recortar en investigación y despedir científicos, ni para que los jóvenes mejor formados tengan que irse al extranjero en busca de una oportunidad de futuro.
Para lo que no está el país es para más recortes ni más privatización de nuestra Sanidad y Educación públicas mientras el 80% de las empresas del IBEX-35 opera en paraísos fiscales.
Para lo que no está el país es para pagar visitas del Papa, aeropuertos sin aviones, circuitos de fórmula 1, proyectos fallidos de Juegos Olímpicos, estaciones de AVE sin viajeros, despliegues de tropas en Afganistán ni otros gastos militares desmesurados, tramas de corrupción y privilegios de familia real, políticos, y altos cargos.
El país no está para ninguna de esas cosas y la huelga general es nuestra única manera de decir BASTA YA.

Argumento esquirol #15 "Yo siempre hago huelga pero esta vez..."

Por favor. Que nos conocemos.
Huelga General 29M: Tú decides.
Si la huelga del 29M es un éxito rotundo y el gobierno no rectifica quedará totalmente deslegitimado. Eso tendría un coste político elevadísimo, abriría la puerta a más huelgas generales, e incluso podría forzar la dimisión del gobierno. En cualquier caso le garantizaría un varapalo electoral. Si por el contrario una huelga general de un día no consigue un paro total el gobierno saldrá reforzado, la posibilidad de una movilización más contundente por parte de la sociedad quedará anulada y la puerta a más recortes y a mayores abusos (si cabe) contra la mayoría de los ciudadanos (estudiantes, pensionistas, funcionarios, interinos, trabajadores del sector privado, parados) quedará abierta.


"A los que no aceptan la reforma laboral, hay que decirles que qué poco quieren a su país y a los trabajadores españoles. Mª Dolores de Cospedal. 10 de Marzo de 2012
"Con más de 5 millones de parados los sindicatos han estado callados. Lo que hacen con esta huelga es una falta de patriotismo." Esperanza Aguirre. 13 de Marzo de 2012.

26 de marzo de 2012

La reforma laboral explicada pro Adoración Guamán



http://niavero.org (CC) | España - Adoración Guamán analiza a fondo la reforma laboral aprobada por el Partido Popular (PP) el pasado 10 de febrero, medida que endurece aún más las condiciones de los trabajadores después de las reformas aplicadas en 2010 y 2011 por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

Adoración Guamán es profesora titular de derecho del trabajo en la Universidad de Valencia y profesora alterna en la Universidad francesa Paris-Ouest.

22 de marzo de 2012

El gobierno para España

El pasado día 20 fue condenado a seis años y dos meses de prisión al ex-presidente de Baleares, Jaume Matas, por delitos de fraude a la administración, falsedad documental (en documento administrativo y mercantil), prevaricación en concurso con un delito de malversación y tráfico de influencias agravado.


No es de extrañar que en este país dónde la justicia la administran los hijos de los que la administraban en la dictadura, la fiscalía haya decidido no pedir el ingreso inmediato en prisión del condenado. Tampoco nos extrañemos de que este delincuente no llegue a pisar nunca una celda, o que, en el peor de los casos vaya a una con todos los lujos de un hotel de 5 estrellas.

Hace 8 años, el entonces candidato Mariano Rajoy hizo unas declaraciones "realmente chocantes" durante un mitin, preparando las elecciones generales que perdería por segunda vez consecutiva.



No deja lugar a dudas de lo que quiere que sea España para el PP, como tampoco no hay dudas de que, si no hacemos algo para evitarlo, todo les marchará muy bien para tener su gran cortijo de chorizos, prevaricadores y corruptos.

19 de marzo de 2012

Declaracion sobre el Agua de la Izquierda Europea

La reunión del Grupo de Trabajo sobre Medio Ambiente de la Izquierda Europea se efectuó en el Foro Alternativo Mundial del Agua, coincidiendo con el Foro Mundial del Agua de Naciones Unidas. 
Estuvieron presentes el Área Federal de Ecología y Medio Ambiente de IU y la Secretaría de Medio Ambiente del PCE, junto con organizaciones políticas de la Izquierda Europea de Finlandia, Dinamarca, Austria, Grecia, Italia, Portugal y Francia.

La primera parte de la reunión del 14 de marzo fue abierta, participando en ella dos movimientos sociales españoles: Ecologistas en Acción e Ingeniería sin Fronteras, y donde se trataron cuatro ponencias de Italia, Francia, España y Grecia. En la segunda parte, de carácter interno, se realizó tanto el análisis de la política ambiental europea como la declaración que redactarían al día siguiente.

En este sentido, desde La Izquierda Europea defendemos la propiedad pública y la gestión pública del agua, la accesibilidad de todas las personas al agua, su saneamiento y reutilización, y la aplicación de una política tarifaria progresiva que garantice los 50 litros por persona y día e incremente adecuadamente el precio del agua según los usos dados y las cantidades consumidas.

La Izquierda Europea está decididamente comprometida en la defensa de los recursos naturales y los bienes comunes de la humanidad, donde destaca de forma especial el agua, un recurso vital y escaso. Debido a este compromiso participó y apoyó activamente el Foro Alternativo Mundial del Agua, que se ha clausurado hoy en Marsella, Francia, y que se celebró durante los días 14 a 17 de marzo de 2012.



Declaración de la Izquierda Europea con ocasión del Foro Alternativo Mundial del Agua celebrado en Marsella, Francia, del 14 al 17 de marzo de 2012


Al igual que el aire, el sol y los bosques, el agua es un recurso de la humanidad que debe preservarse para mantener los ecosistemas que permiten la vida sobre la Tierra. El agua no es, en ningún caso, una mercancía.

La Izquierda Europea defiende con firmeza el derecho inalienable al agua como derecho humano y bien común de la humanidad, comprometida en la lucha por lograr la propiedad y gestión pública del agua y de los servicios de saneamiento que eviten la degradación y faciliten la reutilización de este recurso.

La crisis actual del capitalismo neoliberal pone en peligro el conjunto de los recursos naturales y los bienes de propiedad común. Vemos, por ejemplo, a los gobiernos europeos utilizar la crisis como pretexto para establecer un proceso brutal de privatizaciones sin límite y en todos los ámbitos. Han convertido la deuda pública en la punta de lanza del mecanismo destinado a privatizar todo lo público, como nos muestra con toda crudeza el caso de Grecia, donde en dos meses se privatizarán todas las entidades públicas que gestionan el agua.

En esta situación, la Izquierda Europea denuncia la configuración actual del Foro Mundial del Agua ya que está promovido por las grandes compañías privadas que pretenden apropiarse del agua con el único objetivo de comerciar con ella e incrementar los beneficios empresariales, eliminando, al tiempo, toda posibilidad de intervención democrática en la gestión del agua por parte de la ciudadanía.

Sin embargo, para la Izquierda Europea, la implicación de la ciudadanía, de las personas usuarias del agua, de las asociaciones ecologistas, de los sindicatos, de las asociaciones vecinales y de las administraciones públicas locales, es un objetivo esencial en la lucha contra la amenaza de privatización. Por ello apoya la amplia lucha social que se desarrolla en Europa en defensa del agua y, sobre todo, apoya el método del referendum promovido desde la base de la sociedad que abre la consulta a toda la ciudadanía sobre la propiedad y gestión pública del agua (Italia, Portugal, España, Francia,…).

En efecto, la Izquierda Europea considera que sólo un verdadero servicio público puede garantizar el derecho al agua. Este servicio público tiene que fundarse sobre una organización descentralizada y controlada localmente por los plenos municipales y parlamentos autonómicos, las personas usuarias y el mundo del trabajo. Esto no puede ser realizado más que con el soporte financiero del estado en los ámbitos autonómicos, estatales y europeos, colectivizando los medios para facilitar el reparto de cargas de forma justa y solidaria, con acceso universal y equitativo al agua y al saneamiento independientemente del lugar donde se viva, creando la formación profesional reglada en el área del conocimiento relativa al agua y desarrollando la investigación científica pública en este terreno ya que hoy está acaparada por las multinacionales del agua. En la práctica, lo dicho se traduce en la garantía de acceso a la cantidad mínima de agua que necesita cada persona para vivir (50 litros de agua por día y persona según la recomendación de Naciones Unidas), y en una gestión que diferencia los usos del agua (domésticos, agrícolas, industriales, de lujo,...) como respuesta al interés general de la ciudadanía.

La Izquierda Europea apoya también las luchas e iniciativas impulsadas, por parte de las organizaciones políticas que la integran, desde las instituciones democráticas representativas de los ámbitos municipal, autonómico, estatal y europeo y a favor de la propiedad y gestión pública del agua como derecho social a preservar.

Por eso propugna en la Unión Europea la creación del Fondo Social y Solidario que sustituya al actual «Fondo Europeo de Estabilidad Financiera», ya que este último sólo sirve para imponer austeridad a la gran mayoría de las personas, la parte de la sociedad que no es responsable de la crisis financiera existente. El fondo europeo propuesto es una banca pública destinada a facilitar las inversiones al servicio de la actividad productiva que genera desarrollo humano, social y ecológico. Dicho fondo tiene que efectuar también un papel motor en la puesta en marcha de la colaboración «pública-pública» en materia de cooperación internacional, para crear una alternativa de carácter mundial al saqueo orquestado por las transnacionales.

Izquierda Europea, 17 de marzo de 2012

12 de marzo de 2012

La historia de Navarre el Lobo



El pasado nueve de enero fue encontrado en los alrededores de Bolonia (Italia) un lobo en un río, desnutrido, malherido y congelado y con 35 balínes en el cuerpo. Cuando los agentes del Centro de Fauna Exótica y Selvática Monte Adone pudieron rescatarlo fue reanimado con un masaje cardíaco e incluso con respiración boca a boca.

Posteriormente fue operado y el lobo se encuentra felizmente en el centro de recuperación.



A día 5 de marzo, el lobo había cogido ya 5 kilos de peso y las heridas habían mejorado. Los agentes creen que en breve podrá ser liberado.

Días después otro lobo fue encontrado agonizante en una carretera cercana, pero este no ha tenido tanta suerte como Navarre.

 

Esta historia con final feliz viene muy al hilo de la noticia de que la Asociación de Titulares de Cotos de caza de Ciudad Real y Toledo (ATICA, que opera en toda Castilla-La Mancha) ha pedido a Parques Nacionales que se permita la caza en estos lugares protegidos. La principal alegación que hacen es que quién mejor que ellos (los cazadores) para controlar las poblaciones y mantener un equilibrio de especies.
No contentos con esta barbaridad en su web profundizan y aseguran:
La subasta de cotos dentro de los Parques Nacionales supondría una fuente de ingresos extra y, además, el ahorro del gasto que supone la plantilla de guardas de campo y funcionarios dedicados al control poblacional o la contratación de empresas de seguridad externas para colaborar con la regulación de estas zonas.
Es decir, no sólo pretenden cazar en Parques Nacionales si no que además quieren estar a sus anchas, sin vigilantes, ni guardas forestales, ni funcionarios que les puedan rechistar. Seguro que así alguno aprovechará para soltarle un buen perdigonazo al primer lobo que tenga la mala suerte de cruzarse en su camino... o a algún senderista que sólo quería pasar el día en el campo.

Existen muchos motivos científicos por los que rechazar esta proposición, no obstante creo que es mas interesante apelar a los mas humanos: el respeto a la fauna salvaje, el mantenimiento de la biodiversidad y el uso y disfrute de estos lugares como sitios de recreo y de ocio compatibles con el respeto al medio ambiente.

10 de marzo de 2012

Huelga general

Por Marat: http://marat-asaltarloscielos.blogspot.com/2012/03/ahora-mas-que-nunca-la-huelga-si.html



1.-De las razones de la Huelga, que no debieran siquiera tener que enunciarse: De todas las Huelgas Generales realizadas en el Estado español desde el inicio de la mal llamada transición política ninguna ha estado tan justificada como ésta, estándolo más que sobradamente todas las demás anteriores.
El escenario sociolaboral español ha cambiado de modo tan profundo y radical que no llevar a cabo esta huelga el próximo 29 de Marzo sería el mayor suicidio que tanto la clase trabajadora como el conjunto del movimiento sindical podrían realizar.
A esta Huelga General los sindicatos y los trabajadores no vamos porque creamos que debemos ir sino porque sabemos que no tenemos otro remedio que ir. No hacerlo sería afirmar y dar por buena nuestra nueva condición de esclavos reducidos a la penuria económica en beneficio de los grandes capitalistas, los plutócratas y el capital financiero.
La Reforma Laboral que justifica sobradamente la convocatoria de esta Huelga General, que debiera ser indefinida si no es porque la realidad de la clase trabajadora española y de su sindicalismo es la que es, marcará un antes y un después en nuestras vidas, hasta el punto de devolvernos a una realidad que desconocíamos y que sólo nuestros abuelos y padres, en el caso de los que somos más viejos, conocieron.
No ir a esta Huelga General significaría traicionar nuestra condición de trabajadores, dar por buenas todas las medidas que se han tomado y que están previstas contra nosotros y aceptar nuestra derrota por anticipado sin siquiera haber hecho un mínimo amago de lucha y resistencia.
Renunciar a una de las pocas armas de autodefensa que tenemos los trabajadores –la huelga-, que ya tienen previsto recortar los empresarios y su gobierno natural, significaría decirnos a nosotros mismos que no nos basta con estos cuatro años de resignación borreguil que llevamos practicando sino que deseamos, que necesitamos, que exigimos, el palo y el látigo como instrumentos de relación del poder económico con nosotros.
No secundar esta Huelga General del 29-M significaría aceptar que se despida a los padres para contratar a precio de saldo a sus hijos que deberían aceptar sin rechistar un nuevo marco de relaciones laborales en el que los derechos del trabajador ya no existen y el despido es parte del libre capricho del empleador.
Negarse a ir a esta huelga es poner nuestras cabezas bajo la cuchilla de la guillotina de un empresariado que ya no tendrá ningún límite a aplicar despidos individuales y colectivos a los que Magistratura de Trabajo considerará, de partida, siempre procedentes.
Rechazar esta huelga significará avanzar cien mil pasos hacia una individualización de las relaciones laborales, ya que predominarán los convenios de empresa, donde las negociaciones se adaptarán, como nunca lo hicieron antes al “sí señor”, por encima de los de rama o sector. En esa individualización de las relaciones laborales se hará más cierto que nunca que no existe un libre acuerdo entre iguales –nunca lo han sido patrón y trabajador- sino la conocida imposición del “esto son lentejas...”. ¿Se imaginan las posibilidades no de negociar un convenio, sino de defender condiciones de trabajo, de despido, de respeto al trabajador, en una pequeña empresa en la que no exista representación de los trabajadores y en la que ya no será posible acogerse a un convenio de sector o rama productiva? Por cierto, la Reforma Laboral permite también al empresario saltarse los acuerdos de empresa casi en cualquier situación ordinaria en cuanto se invente una causa económica, técnica o productiva. Lo dicho: las relaciones laborales seguirán más que nunca el principio de “esto son lentejas”
No participar en esta Huelga General es permitir que se institucionalice la figura del mobbing, al dar carta blanca al empresario para degradar de categoría al trabajador, obligarle a realizar tareas que no le corresponden por su categoría profesional o desplazarle geográficamente a donde aquél considere oportuno en cada momento. Y le permitirá hacerlo con la ley de la Reforma Laboral en la mano.
No estar en Huelga General el 29-M es considerar que el trabajador no tiene derecho a ponerse enfermo y aún menos derecho si es una gripe un poco complicada, cuya convalecencia llegue a los 10 días, porque será motivo de despido por causas objetivas; es decir, de forma indisutible, para que nos entendamos.
No apoyar esta Huelga General significa dar una puñalada trapera a la capacidad de representación de los intereses y derechos de los trabajadores por parte de los sindicatos. Y eso no es otra cosa que atentar el trabajador contra sí mismo, contra su derecho a protegerse de los abusos empresariales.
Podría seguir enunciando los cientos de motivos que esta Reforma Laboral del PP da para ir a la Huelga General, entre otros que no es una reforma pensada para crear empleo sino para lograr la más brutal vuelta de tuerca de los capitalistas contra los trabajadores y lograr, de este modo, que disciplinadamente acepten estos salarios de miseria, despidos casi gratuitos, explotaciones laborales odiosas y humillantes y la mayor transferencia que han conocido los tiempos de las rentas del trabajo a las del capital. Todo eso con una disciplina en la empresa de preso condenado a galeras.
Pero insistir en la Reforma Laboral como motivo para la ir a la Huelga General sería un modo de ocultar que hay infinitas más razones para hacerlo.
Vivimos tiempos en los que el capital ha decidido que los trabajadores habíamos disfrutado de demasiados derechos. A la educación gratuita (que nunca lo fue del todo), a una sanidad pública, que han arruinado para enriquecer a sus amigos de las mutuas, a una jubilación que nos proteja de los peores temores de la vejez, que ya amenazan como insostenible. A unos servicios sociales que protegieran y cuidaran de los desfavorecidos.
Acabar con todo eso que comúnmente conocemos como Estado del Bienestar es una oportunidad de negocio privado para el poder económico que siempre hipotecó nuestras vidas pero que ahora lo hace con total impunidad.
Lo que el empresariado busca es colocar a la clase trabajadora en su sitio. Ese del que, en su opinión, nunca debimos salir, el que corresponde a los subordinados que no hemos mejorado nuestra condición porque no nos esforzamos y no somos como esos chicos master de clase media emprendedores, el que corresponde a la plebe que, en su opinión, somos.
Nada para comprenderlo como leer a Salvador Sostres, en El Mundo. Las columnas de este misógino filonazi, que odia a las mujeres (1) quizá como a su propia madre, son todo un editorial ideológico de lo que la derecha –sí, la derecha del PP- y la clase capitalista a la que representa tienen pensado para nosotros los trabajadores:
“Lo que los empresarios necesitan es que los dejen en paz. Que dejen de ahorcarles con impuestos, que dejen de molestarles con absurdas regulaciones y demenciales burocracias. Que dejen de ponerles bajo sospecha y que alguien, de vez en cuando, les dé las gracias por pagarlo todo y hacer posible que el invento funcione. Y sobre todo, necesitan poder adaptar su empresa a cada momento, adelgazándola sin coste cuando la situación económica no permita excesos. Es imprescindible que las empresas puedan hoy despedir sin arruinarse, porque así podrán sobrevivir y volver a contratar cuando el susto pase. 33 días por año trabajado es una barbaridad. 20 días por año trabajado continúa siendo un disparate.
La gente tiene que interiorizar que va a cobrar una parte del beneficio que genere y que éste es el único trato. Ni despidos improcedentes ni días personales. Un empleado es un proveedor como otro cualquiera. Tanto aporta, tanto cobra. Y si quiere vacaciones, que se las pague. Y si quiere un seguro médico, que se lo pague. Y si quiere poder retirarse a una edad, que contrate un plan de pensiones, y que también se lo pague. Yo le pago a usted su trabajo, y basta. Yo me casé sólo con mi mujer y a usted no le debo nada”. (2)
Frente al ataque más salvaje que ha sufrido la clase trabajadora sólo nos queda la rebelión y la Huelga General no como punto y aparte sino como punto y seguido de una respuesta colectiva que diga alto y claro que no podrán imponernos la dictadura capitalista, ya sin la máscara de “capitalismo de rostro humano”, que tanto añoran algunos que se indignan hoy sin haberse indignado antes, sin encontrarnos en frente y dispuestos a pelear.
En esta España que sufre el pánico hacia lo que los cursis llaman el ataque de los mercados, y que no es otra cosa que la vieja rapacidad capitalista, llevamos demasiado tiempo sintiendo miedo de tener miedo, recitando entre dientes el “Virgencita, que me quede como estoy”, esperando inútilmente una recuperación económica que no esperan los propios capitalistas porque saben que no se recuperará el consumo a crédito y no se plantean el crecimiento sino sólo la supervivencia de los más poderosos. Cerca de cinco millones y medio de parados y Amancio Ortega, el empresario modelo, se aupa al quinto puesto de la lista Forbes de los más asquerosamente ricos del mundo.
Este capitalismo, en su etapa senil, morirá matando. Los hombres más ricos del mundo ya no piensan en la supervivencia de su estirpe, ni en el futuro de su camada. El negocio para ellos es hoy, no dentro de cinco minutos y, en esa espiral enloquecida, saben que su ganancia reside en nuestra miseria, la de los trabajadores. Dos horas más de trabajo no remunerado, un despido aún más barato, unas condiciones de trabajo más inseguras y precarias, unos salarios aún más bajos, unos impuestos que pagamos nosotros antes que las clases medias y las rentas altas,...Todo vale para lograr un poco más de beneficio empresarial. Al salchichón le fueron cortando rodaja tras rodaja, primero finas, luego más gordas. Finalmente, ya les falta poco para llegar a la cuerda.
Sólo los tontos creen todavía que esto es un asunto sólo de políticos y banqueros. Los trabajadores mileuristas, y los millones de mucho menos que tales, saben desde siempre que su peor enemigo lo tienen en su centro de trabajo, aunque si éste es grande, quizá nunca hayan llegado a verle la cara.
2.-Algunas consideraciones acerca de la naturaleza de la Huelga General:Es contra el miedo a tener miedo, contra el estar hartos de estar hartos, contra la miseria de esperar que, si nos portamos bien, pronto vendrá la recuperación económica que haga que caigan de la mesa del opulento hacia nosotros, sus títeres, unas migajas que nos conformen contra lo que debemos levantarnos, gritar nuestra rabia, poner en marcha nuestra insumisión, expresar nuestra voluntad de pinchar el balón de la fiesta de los vampiros.
Esta Huelga General no puede ser una Huelga General más. No podemos volver al día siguiente, con las orejas gachas, al triste cubículo laboral que cada uno ocupamos, la mordiente realidad de un paro que nos desespera y nos asusta, a pensar qué pasará mañana, hasta cuándo resistiremos sin gritar basta, sin levantar nuestro puño amenazante sobre las cabezas de nuestros verdugos.
Esta Huelga General tiene que ser un levantamiento general de nuestra clase, la trabajadora, contra nuestra modorra y nuestros temores, contra nuestro conformismo y contra el fatalismo del “no se puede hacer nada”, “no hay salidas”, “no hay alternativas” contra lo que debemos presentar la batalla a muerte de la huelga.
En primer lugar siempre es posible decir NO. No hacerlo forma parte de la comodidad de quienes nunca se hacen preguntas, de los analfabetos políticos que transitan por la vida sin preguntarse si quieren ser matillo o yunque, de aquellos que prefieren ser borrego blanco por temor a ser considerados ovejas negras por sus patrones, de quienes creen que hundiendo sus cabezas hasta lo más profundo de sus hombros pasarán desapercibidos ante los ojos del poder económico y la crisis capitalista no llegará siquiera a rozarles. Ignoran que todos los trabajadores estamos llamados, unos antes, otros después, a sentir en nuestras carnes el hierro candente de la precariedad y la pobreza a la que nos condena el capitalismo depredador porque nuestras miserias son su opulencia. Decir NO es el único camino para que nuestras vidas tengan mañana un SÍ de esperanza.
En segundo lugar es mentira que las huelgas sean inútiles. Lo que es inútil es aceptar resignadamente lo que nos sucede, no poner pie en pared y no rebelarnos para que vuelvan a temernos nuestros enemigos de clase, quienes detentan los poderes económicos.
Si Rajoy ha sacado pecho, rechazando cumplir con los objetivos del déficit del 4,4% para fijarlo en el 5,8%, es porque, como el mismo ha admitido, teme “un incendio social”. Es evidente: la huelga paga pero, para que lo haga, la huelga debe adquirir un carácter de revuelta social y sus llamas tienen que iluminar los balcones de la Moncloa.
Hay mucho lumbreras que predica que los griegos, a pesar de tanta huelga no han conseguido nada. ¿Se han preguntado cuál sería su situación si no hubieran llevado a cabo esas huelgas? Falta demasiada imaginación en quienes creen que ya no se puede triturar más nuestros cuerpos, mentes y vidas.
Los griegos nos están dando un ejemplo a los europeos y a los ciudadanos –tanto ciudadanismo y tan poco sentido de clase me repatea- españoles como clase y como pueblo. Como clase expresan su voluntad de no dejarse oprimir más sin resistir a esa opresión con su lucha. Como pueblo están demostrando la tenacidad de quienes dicen no a la Europa de los mercaderes y a los dictados de sus especuladores.
Esa lección que nos dan los trabajadores griegos debe inspirar el espíritu de un 29-M del que nazca un proceso combativo, sostenido en el tiempo, de resistencia en la que forjar la recuperación de nuestra conciencia como clase oprimida.
El 29-M debe ser el momento de arrojar por la borda esa estúpida pretensión de ser clase media, que nunca fuimos, a través de la ilusión que producía la tarjeta de crédito, las compras aplazadas y los préstamos personales. Ese barco ya partió y no volverá al mismo puerto. Somos clase trabajadora y nuestra emancipación pasa, no por creernos lo que nunca seremos, sino por darnos cuenta de que el mundo se para si nosotros lo hacemos, que sin el valor que aportamos a lo que producimos el beneficio empresarial no existiría, que las empresas pueden funcionar sin empresarios pero jamás sin trabajadores.
El 29-M debe ser también una huelga contra las prácticas sindicales que hemos conocido hasta ahora. Contra el pacto social y un sindicalismo de concertación que nos ha llevado a debilitarnos como clase con capacidad de hacernos temer por nuestros explotadores. La Reforma Laboral significa el acta de defunción que la patronal y su gobierno natural le han dado al pacto social. Ya no necesitan un modelo sindical de concertación, ni unos sindicatos apagafuegos, porque ya no quieren un Estado del Bienestar que se asienta precisamente en la conciliación de clases.
Es necesario hacerles llegar a los señores Toxo y Méndez un aviso contundente de parte de los trabajadores que secundaremos esta Huelga General. NO MÁS PASTELEOS. NO HAY NADA QUE PACTAR. Entre otras cosas porque los capitalistas y su gobierno natural han dejado de temer a los sindicatos y a los trabajadores y el único medio de arrancarles algo es por la fuerza de los hechos. No se trata de pactar una reforma laboral menos mala, como pretenden CCOO y UGT, que han avisado de que desconvocarían la huelga el mismo día 28 de Marzo, si el Gobierno se atiene a razones. El único acuerdo que cabe establecer es la derogación de la Reforma Laboral y la paralización de los planes antisociales de privatizaciones, recortes sociales, desmonte de la enseñanza y la sanidad pública y planes para acabar con las pensiones públicas. No estamos dispuestos a jugar a la mentira del mal menor. El que se nos ha provocado es ya mayor. Queremos que la crisis la paguen los que la provocaron, los capitalistas.
Pero también debe significar decir NO a ese sindicalismo supuestamente más radical que, sin embargo, se ha limitado a anunciar, en un brindis al sol, durante casi un año un camino “hacia la huelga general” que sólo ha convocado gracias a la valentía previa del sindicalismo vasco y gallego, que le pusieron fecha, y ante la evidencia de que la misma era manejada por los sindicatos mayoritarios.
Los trabajadores no necesitamos unos sindicatos que utilicen su fuerza y su representación para vendernos a bajo precio ni tampoco unos sindicatos que cacareen como el desplumado gallo de Morón al grito de ¡huelga, huelga! pero que son incapaces de tomar en sus manos la combatividad que otros abandonaron hace tiempo.
Pero sí necesitamos, indiscutiblemente, sindicatos porque es el mejor tipo de organización que hemos sabido crear para defender nuestros intereses en la empresa, a menos que hayamos decidido comprar la mercancía averiada que nos vende la Brunete Mediática de la extrema derecha, dedicada a agredir inmoralmente al movimiento sindical, callando en su indecencia habitual las prácticas mafiosas de la patronal, sus cuantiosas subvenciones y sus numerosos liberados y el carácter delictivo de muchos de los dirigentes empresariales de dicha patronal.
Es importante reseñar esta cuestión porque en ciertos espacios, de mayor impacto virtual que real, y de supuesta orientación radical se han producido, justo en el proceso de calentamiento hacia la Huelga General, discursos que muy bien podrían haber sido hechos por incalificables personajes como Jiménez Losantos o alguno de los “cómicos” habituales de las tertulias de Intereconomía.
Cuando estos comportamientos, que sólo buscan debilitar el éxito de la huelga, vienen de jóvenes universitarios de clase media no debe sorprendernos. Es parte de la ideología en la que se criaron, enaltecedora del individualismo pequeñoburgués que les define, que repele todo lo que huela a clase trabajadora y a sus organizaciones porque les recuerda la tensión entre su aspiración a ocupar el estatus ahora amenazado de sus padres y el riesgo de proletarizarse, que tanto les repugna.
Es más grave cuando viene de trabajadores y de miembros de otros sindicatos que ponen por delante sus propios desahogos personales, muy justificados, pero inoportunos al momento porque es justamente éste en el que no toca.
Algunos debieran entender que, cuando ante el proceso hacia la huelga, se dedican al ataque sistemático a quienes mayor capacidad tienen de sacarla adelante lo que están haciendo en realidad es disparar contra la huelga, sin obtener sus opciones organizativas, cuando las tienen, ventaja alguna porque contribuyen a desacreditar a quienes tienen mayor capacidad de sacarla adelante.
A partir del 30 de Marzo leña al mono hasta que cante La Marsellesa. Pero ahora la huelga debe de ser de todos, dentro de que cada corriente sindical intente llevarla en la dirección que considere más correcta. Desde mi perspectiva, desbordar los objetivos de las direcciones burocráticas de CCOO y UGT para crear una conflictividad social que mande a este Gobierno de extrema derecha liberal el mensaje que continuar robándonos nuestros derechos y conquistas sociales le puede salir muy caro, a él y a la clase a la que representa.
El sindicalismo, no el reformista o el combativo, sino el sindicalismo en general, está siendo atacado por nuestros enemigos de clase porque saben que, más temprano que tarde, acabará siendo, aunque durante estos años haya sido el convidado de piedra de la lucha de clases, el valladar más poderoso contra sus desmanes.
En nuestras manos está cambiarlo en lo que sea necesario, remover burocracias, denunciar las corrupciones donde las haya, combatir a quienes defienden prácticas entreguistas o mandar al paro a los que han hecho del sindicato su “modus vivendi” y convertido su cargo en vitalicio. Pero esto no en determinados sindicatos sino en todos porque lo que en unos es más visible en otros pasa más desapercibido pero es igualmente rechazable.
Pero sin sindicatos los trabajadores somos carne de cañón de la reacción capitalista. En defender al sindicalismo como forma de organización de los trabajadores nos va en gran medida nuestro futuro; algo que quizá comprendiésemos mucho mejor si los convenios colectivos fuesen de aplicación sólo para los afiliados a los sindicatos, quienes los defienden, y no para los esquiroles y quienes los atacan pero no renuncian a las ventajas que de dicho convenio pudieran obtener. Con ello los sindicatos ganarían en independencia, al no ser ya subvencionados por el Estado, por no representar a todos los trabajadores sino sólo a los sindicados, y se eliminaría el parasitismo de quienes maldicen contra ellos pero obtienen beneficios de su acción en la empresa, lo que sería provechoso para la conciencia de clase de los trabajadores.
3.-Apéndice final: de los “argumentos” de la Brunete mediática y sus compañeros de viaje: De entre el amplio abanico de tonterías y artilugios que la reacción capitalista y sus compinches se sacan, huelga tras huelga, para actuar como piquetes contra la misma, hay algunas perlas a las que me gustaría responder, del mismo modo en que lo hice el 29-S de 2010 (3)
Perla primera: Las encuestas revelan que los españoles están contra las medidas del gobierno pero también contra la Huelga General porque creen que no servirá de nada. Existen mentiras, embustes y estadísticas. Éstas últimas son siempre las que se hacen por encargo del poder económico, que es el que puede pagarlas.
Los medios de comunicación de la burguesía ya han puesto el titular sobre el resultado de la huelga antes de que se produzca, en una muestra más de su “democrático” proceder. La respuesta debemos dársela de modo consciente, organizado y disciplinado en la calle el 29-M.
Perla segunda: los parados no podemos ir a la huelga y los sindicatos nunca defienden nuestros intereses. Hay que decir que la autoorganización de los parados es algo complejo de lograr porque el objetivo del propio parado es dejar de estarlo y ello no suele generar una conciencia colectiva que les lleve a crear estructuras permanentes y amplias.
Pero es llamativo que las víctimas del sistema se conviertan en monedas de cambio de sus propios enemigos de clase. Así sucedió en la pasada Huelga General del 29-S en donde alguna organización de parados trabajó conscientemente para los medios de comunicación de la ultraderecha, enfrentándose a la propia huelga general. El antagonismo natural no es entre trabajadores ocupados y desempleados ya que unos no son culpables de la situación de los otros, sino ambos víctimas de un mismo sistema económico al que deben enfrentarse.
Es falso que porque un trabajador esté en paro no pueda hacer huelga porque carece de un empleo del que ausentarse. Participar en la Huelga para un parado es tan posible como para un trabajador activo. La autoorganización de los parados bien puede hacer cosas prácticas de gran interés para el éxito de la huelga como ayudar a los demás piquetes de trabajadores ocupados para bloquear las entradas a los bancos y grandes empresas, actuar como piquetes en el transporte o cerrar las entradas a los centros de distribución. Y el parado no organizado bien puede unirse a los piquetes informativos de su zona. Nada de se lo impide. Es cuestión de voluntad o de no tenerla e inventarse excusas.
Perla tercera: Los piquetes se dedican a impedir el derecho a trabajar a quienes no están con la huelga. El Madrid republicano de 1936 a 1939 sufrió los atentados fascistas de la quintacolumna. Ésta sigue actuando. Su derecho a ser un esquirol busca el fracaso de la huelga para impedir que defendamos eficazmente nuestros derechos. La mejor respuesta a estos sujetos es el piqueteo en acción directa.
Perla cuarta: La huelga sólo busca fortalecer a los burócratas sindicales de CCOO y UGT. Una variante del “argumento” tercero, frecuentemente utilizado por los esquiroles, aunque también se encuentra entre miembros de un autodenominado “bloque crítico”. No debe sorprender. Dentro de ese discurso se dan la mano los aventureros con los reaccionarios, los desclasados con los ignorantes políticos, el radicalillo de salón con el fascista mal camuflado.
Está huelga está convocada por todos los sindicatos de clase, incluyendo también a los de la mayoría sindical nacional vasca y gallega, los de corte anarcosindicalista y los alternativos. Es pues una huelga de los trabajadores, no de unos u otros sindicatos. Y si puede fortalecer algo es al sindicalismo en su conjunto.
NOTAS:
(2) Salvador Sostres. “Cómo se nota”. El Mundo, 14 de febrero de 2012